Nuevos documentos demuestran que los ingleses se sintieron muy celosos ante la llegada de la Torre Eiffel a finales del siglo diecinueve, tanto así que llevaron acabo un concurso para construir un edificio del mismo tipo para el Reino Unido.
Cuándo la Torre Eiffel fue construída en el año de 1889, conviertiéndose en la más grande de Europa, los ingleses se quedaron con la idea de contruir una torre similar excepto que sería… Más grande. En un acto de celos, varios arquitectos fueron llamados a diseñar la que sería llamada “La Gran Torre de Londres”.
El diseño de Stewart, Maclaren y Dunn ganó, y se empezó a construir cerca de Wembley Park con la intención de que además fuera la principal atracción de una feria que se asentaría a sus alrededores. Sin embargo, al parecer nadie se dió cuenta de algo: no había dinero. A los pocos meses de su contrucción dejaron de haber fondos para poder terminar la obra.
Mientras que la Torre Eiffel fue financiada por el gobierno francés, esta nueva torre fue completamente pagada por la empresa Tower Company. Irónicamente, tras haber sido abandonada, años después se contruiría sobre los restos de la Torre el estadio Wembley.
Por supuesto, este diseño junto con los otros que participaron en el concurso fueron descubiertos recientemente, que podrán ver aquí:
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